Para prolongar la vida útil de las bombillas de luz LED, los fabricantes están buscando un par de opciones de refrigeración LED. La primera de estas opciones utiliza un disipador de calor. Un disipador de calor es un componente separado que absorbe el calor de la lámpara LED. La segunda opción en el mercado es la convección. La convección utiliza un ventilador u otro dispositivo para atraer aire frío sobre la lámpara LED. Ambas opciones están actualmente en el mercado hoy. Las luces LED no emiten mucho calor hacia el frente. Gran parte de su calor sale por la parte trasera de la propia lámpara. Para hacer frente a este problema, los fabricantes han tenido que encontrar soluciones para mantener este calor fuera de los componentes.
El calor excesivo en una lámpara LED puede acortar la vida útil de la lámpara y la lámpara. Una de las mayores ventajas de LED f
ixtures es la larga vida de las lámparas. Algunos de ellos tienen clasificaciones de hasta 100.000 horas de lámpara. Para lograr esa longevidad, es imperativo que el calor que emana de una luz LED vaya a otro lugar. El calor excesivo puede acortar la vida útil de la lámpara y dañar los componentes subyacentes de la lámpara. Al observar estas dos opciones de refrigeración LED, está viendo tecnología de refrigeración pasiva y activa.
La tecnología de refrigeración pasiva utiliza el disipador de calor. Un disipador de calor transfiere el calor de cualquier material sólido a un medio fluido como el aire o el agua. Uno de los desafíos en el uso de un disipador de calor es el hecho de que necesita la capacidad de absorber el calor y disiparlo a un ritmo que se mantenga al día con la cantidad de calor que sale del LED. Si el disipador de calor no tiene la cantidad óptima de capacidad, el calor puede acumularse gradualmente detrás de la luz LED y comenzar a dañar los componentes. Para aquellas luminarias que utilizan la tecnología de disipador de calor, la innovación es la única manera de hacer que funcione.
La tecnología de refrigeración activa utiliza la convección para sacar el calor del LED. Al mover el aire a través de los accesorios, el calor se aleja. Al usar un ventilador activo, la cantidad de aire que pasa sobre los dispositivos LED es lo suficientemente alta como para mantener el dispositivo más fresco. Cuanto mayor sea el volumen y la velocidad del aire que se mueve a través del accesorio, mejor será la disipación de calor. Cuando se trata de mirar estas dos opciones de enfriamiento LED, ambas funcionan. Sin embargo, la tecnología de enfriamiento activo parece ser la opción más eficiente.